Este verano pasado estuvimos de visita en Suiza, y aunque nuestra idea original era ver slo Zrich y, con suerte, los alrededores, nuestros anfitriones nos organizaron visitas a muchas de las ciudades de la parte alemana de este pas: San Galo, Lucerna, Zrich, Basilea, Lauterbrunnen (desde donde subimos a los Alpes), Baden y Berna.Uno de nuestros amigos ha pasado varios aos trabajando y estudiando en esa ltima ciudad y la conoce bastante bien. En el paseo que nos regal por su parte antigua para mostrarnos sus lugares ms representativos hubo algo que me llam la atencin: en todas partes de una forma u otra haba alguna alusin a los osos, desde una calle en el centro que tena varias fuentes y en cada una haba una escultura de uno o varios osos, hasta el gran oso rojo en medio de la bandera de la ciudad. Y es que -nos explic nuestro amigo- en el origen de Berna hay una leyenda que cuenta que a principios del siglo XII el duque Berchtol V, su fundador, le puso el nombre del primer animal que caz en su territorio y que result, adivinen, un oso ("bern" en alemn). Hay otra explicacin del nombre que habla de antiguas palabras celtas, pero resulta mucho ms aburrida. As, casi desde la fundacin de la ciudad el oso se considera su animal protector, y se mantienen algunos ejemplares en un recinto al lado del ro conocido como "el foso de los osos". Claro que en Berna hay mucho ms que ver. El casco histrico es de esos lugares que hay que visitar alguna vez en la vida. All se siente uno como en medio de un decorado de pelcula medieval, con flores en todos los balcones, ventanas de madera calada, techos a dos aguas, y hasta un reloj del que salen autmatas en las horas en punto (el ms antiguo de su tipo que sigue funcionando). Pero, segn nuestro anfitrin, si vas a Berna es imperdonable que no vayas a ver a los osos. Bueno, se preguntarn ustedes a qu viene toda esta historia sobre osos y ciudades medievales. Resulta que nunca he ido a Australia, donde me imagino que sea ms comn ver koalas, y en los zoolgicos que he visitado no ha habido ninguno. Vamos, que en mi vida nunca he visto un koala salvo en dibujos animados y en documentales de televisin. As que pensando y pensando en este animalito me di cuenta de que, a falta de una ancdota con koalas, tena esta historia reciente de la visita a la linda Berna, la ciudad de los osos, y que puesto que los koalas tambin son osos, todo queda en familia.